Llena un tarro de dos litros con 3/4 de cerezas dulces deshuesadas sin aplastarlas
Añade 200 g de azúcar glass, una vaina de vainilla y acaba de llenarlo con coñac
Cierra el tarro y déjalo durante 2 semanas
La infusión estará lista cuando las cerezas empiecen a flotar